"Tradicional pero flamenco de hoy, romántico y sentimental más que trágico". Así define el cantaor onubense Guillermo Cano su primer disco, Rincón del pensamiento. Y nada de compás desenfrenado y guitarras como metralletas. Cano ha apostado por el buen gusto, por la melodía. "Mi sueño es el flamenco musical, melodioso", explica. Comenzó a participar en los festivales de flamenco hace cuatro años y, entre otros premios, se hizo con la Volaera Flamenca de Loja, además de cuatro premios en el Festival de las Minas de la Unión cantando por cartageneras, taranto, granaína y media y seguiriya.
Y a pesar de su corta trayectoria profesional, el cantaor de Bollullos Par del Condado ya ha compartido escenario con figuras como José Menese, El Lebrijano, Manuel Mairena y El Chocolate, además de participar en la última edición del ciclo Flamenco viene del Sur.
Ahora da otro paso con su rincón del pensamiento, un disco en el que canta bulerías, alegrías, aires de levante, malagueñas de Chacón, tangos, soleá por bulerías, guajira y toná de trilla. Toda una declaración de intenciones y un aviso para el que busque una rumbita. Pero lo suyo es el flamenco. "A la hora de los melismas tengo el reflejo en mi voz de maestros como Valderrama, Vallejo, Tomás Pavón...", explica Cano. "Pero tengo en mi voz la realidad de hoy mirando al mañana". Estas palabras se resumen en el sentido homenaje que hace en el disco a "doña Carmen Linares" en el corte Señora del cante, una adaptación del propio cantaor de una canción popular. "El cincuenta por ciento de las canciones las he compuesto yo porque creo que un cantaor debe implicarse lo máximo posible en el disco para que no acabe sonando falso", concluye un cantaor que, pese a las inevitables comparaciones con Arcángel por su procedencia, tiene latir propio.
fuente: granadahoy